Silla de oficina y dolor de espalda: causas y remedios

Más de 15 millones de italianos sufren dolores de espalda en la oficina. Las malas posturas al sentarse frente al escritorio son las principales causas. Así que, si usted también tiene un trabajo sedentario y sufre dolores de espalda, sepa que, en la mayoría de los casos, la culpa es de la silla de oficina en la que se sienta cada día. Mantener una postura incorrecta durante mucho tiempo y hacerlo en una silla inadecuada puede, de hecho, causar problemas en la columna vertebral, provocar dolores y tensiones musculares. La señal de alarma a la que hay que prestar atención es cuando el dolor se localiza en la zona lumbar o cervical. En este caso tienes que cambiar la silla de oficina en la que trabajas.

DOLOR DE ESPALDA EN LA OFICINA: LA SILLA TIENE LA CULPA

La principal causa de los llamados dolores de espalda en la oficina es la postura que mantenemos al sentarnos en la silla frente al escritorio. Una silla de oficina inadecuada es uno de los principales factores que afectan negativamente a la postura, provocando fatiga, dolor de espalda y dolor de cuello y lumbares. Se tiende a llevar la espalda demasiado hacia delante, arqueándola en exceso, o a sentarse demasiado al borde inclinando los hombros. La postura correcta contra el dolor de espalda debe ser, en cambio, la que permite acercar la parte inferior de la espalda al respaldo de la silla, manteniendo la espalda recta y siguiendo la curva natural de la columna vertebral.

REMEDIOS PARA EL DOLOR DE ESPALDA EN LA OFICINA: ELEGIR LA SILLA ADECUADA (Y LOS ACCESORIOS ADECUADOS)

Una buena silla de oficina debe ser ergonómica, es decir, el respaldo debe apoyar tanto la zona lumbar como la espalda y seguir la inclinación natural de la columna vertebral. El asiento también debe ser cómodo, ni demasiado duro ni demasiado blando. De esta forma tu postura es correcta y evitas sobrecargar la zona lumbosacra, manteniendo tus músculos relajados y previniendo el dolor. La silla de oficina que utilices debe tener una altura ajustable, así como la posibilidad de inclinar el respaldo como prefieras. Estas características le permiten adaptar la silla a su cuerpo y a sus necesidades. Para mantener la espalda recta y combatir el dolor de espalda, también puede optar por comprar un cojín especial. Este cojín, generalmente ergonómico, puede colocarse en el asiento (para mayor comodidad) o en la espalda, en la zona lumbar. Estos cojines son especialmente adecuados si tienes una silla que no es ergonómica. Con la compra de un cojín lumbar, podrá resolver el problema de las malas posturas, proporcionar un apoyo adecuado y, por último, librarse de los dolores de espalda.